lunes, 3 de diciembre de 2007

¿Navidad...? No, gracias.

Ya quedan pocos días para la llegada de la Navidad, época muy esperada por muchos. Personalmente es una fecha que prefiero que pase pronto. Estas fiestas me deprimen.

Para mi familia, el mes de diciembre ha sido siempre muy señalado, cumplimos años mi hermano el 3 y yo el 24 de diciembre. Siempre hemos festejado todos juntos estas fechas, cenas familiares, regalos…hemos tenido árbol decorado, belenes, misterios, el ambiente, por qué no decirlo, era bonito.

Ahora, ¿por qué me apenan precisamente estas fechas? No se…creo que es la época del año en que las diferencias se hacen más notables.

Hemos hecho de la Navidad una fiesta para gastar dinero, dinero y más dinero. Nuestro afán consumista no tiene límite…las tiendas y las calles están llenas de personas dispuestas a dejarse los dientes para comprar. Todo, para colmo, está carísimo, desde los regalos hasta la comida que te llevas a la boca en las cenas de Nochebuena y Nochevieja. Es un auténtico abuso lo que sufrimos en estas fechas y, lo peor de todo, no se nos quita la sonrisa de la cara cuando nos vacían la cartera comprando cosas que en cualquier otra época del año nos valdría 6 veces menos.

En estos días me acuerdo de mis familiares que ya no están, los echo de menos todo el año, pero en Navidad, al igual que los precios, todo aumenta. Temo el día que falten mis abuelos maternos, ambos son mayores y son las personas que más quiero en el mundo. Siempre pienso que éstas podrían ser sus últimas fiestas…mejor lo dejo…

Qué triste me ponen estas fiestas…

Que sí, que todo llega, y ya ha llegado diciembre y en pocos días la Navidad…A ver si pasa pronto…

2 comentarios:

Scabio dijo...

En mi casa tuvimos unas navidades pasadas para olvidar, pero este año precisamente por eso creo que mis navidades serán mucho más alegres. Cierto es que tras las del año pasado, las veo con algo de reticencia, pero sigo siendo una de esas personas a las que le gusta ese ambiente navideño que me recuerda a mi infancia, que es cuando más se disfrutan. En el peor de los casos, se pasan pronto...

Aaadios

Anónimo dijo...

A mi la Navidad me encanta, me parecen unas fiestas verdaderamente preciosas por dónde quiera que se miren (las reuniones, las luces, los regalos, la cercanía a los demás, la compañía de los tuyos...)y hay que reconocer que el espíritu que las inspira es positivo, aunque de nada sirve si no se mantiene durante el resto del año.
Pero sin embargo la Navidad me da asco tal y como nos la presentan hoy, y no voy a los desánimos, tristezas o depresiones que pueda infundir en algunas personas, sobre todo a raíz de que te falte alguien, sino a locura obsesivo-consumista en la que se ha convertido. Como todo lo que se ha desbordado en los últimos años, la Navidad también se ha pasado de rosca. ¿Qué hacen 300.000 bombillas encendidas en Huelva cinco o seis horas diarias desde el día 3 de? diciembre, cuando quedan aún tres semanas para Navidad? Que no me hablen luego de cambio climático. Esta es una de las cosas que más me irrita de entre las muchas idioteces que se cometen en torno a estas fiestas.
Y al final la Navidad no será más que un pretexto de los restaurantes, centros comerciales, empresas y demás para ganar dinero, si no es en lo que se ha convertido ya.
Conclusión, hay gente pa tó.
Ahí por adelantado esta felicitación para el año nuevo: que las pulgas de mil camellos egipcios infecten el culo de quien intente joderte el 2008 y que sus brazos sean tan cortos que no pueda rascarse. ¡Feliz año nuevo!